Aparece, sin acabado en cal que lo cubra, el trabajo en piedra con el que se construyeron las bóvedas y nervaduras de la iglesia. En términos estructurales, todas las piedras se apoyan mutuamente.
Las líneas negras simulan bloques de piedra, aunque su forma rectangular no coincide con la piedra expuesta. En un tiempo, todas las paredes de la iglesia estuvieron cubierta de patrones regulares delineados en negro.
Las losas de mármol color ocre destacan la presencia de una cripta que yace sellada, bajo tierra, sin conocimiento histórico sobre quiénes fueron enterrados en ella.