Bóveda de la Capilla de la Virgen de Belén

Para entender las cicatrices de un espacio

Esta bóveda se construyó para ampliar la cabida de la Capilla de la Virgen de Belén que se observa al fondo. Diferentes aspectos propios de la construcción de la iglesia se hacen aquí evidentes.
El muro oeste – parcialmente sin encalar – revela materiales propios de la era colonial española en la Isla: piedra, ladrillos y mampostería. Observe cómo se injerta la parte añadida al segmento de pared original del templo.
Dos paredes incluyen perforaciones que se conocen como mechinales. Durante la construcción, se abrían en las paredes para apoyar las vigas de los andamios de la época. Según subía el edificio, se hacían más mechinales.

¿Qué representan las vidrieras?

Las ventanas ostentan vitrales alusivos a los Misterios Gozosos asociados al rezo y meditaciones del Santo Rosario en el ritual católico. Las piezas ilustran e identifican momentos de la vida de Jesús y María.
Cada vidriera incluye un emblema único. Puede observarse el escudo de Puerto Rico, el lema “la Congregación de la Misión” de los frailes paúles, el escudo de la orden de los frailes dominicos y los varios escudos de los reinos de España.
Los vitrales fueron realizados en los 1920’s por la Casa Mauméjean, de Madrid, que estampó su firma en la parte inferior de dos vidrieras. Para la restauración de San José se repararon e instalaron en un sistema de hierro operable que facilita su mantenimiento y remoción cuando amerite.